Vuelta a la realidad en las bolsas tras el dato de inflación en EE.UU

Las bolsas en Estados Unidos cerraron ayer su peor sesión desde junio de 2020, con una caída del 4,3% para el S&P 500. El dato de inflación, a pesar de ser inferior al mes pasado gracias a la reducción en los precios de la energía, mostró que los componentes más estables como el coste del alquiler o el precio de los servicios continúan su ascenso. Los inversores interpretaron esto como una señal de que la Fed continuará su camino de subidas rápidas e incluso las probabilidades implícitas en los futuros de tipos de interés asignan ahora un 20% de probabilidades de ver una subida de 100 p.b. en la próxima reunión, que se celebrará el miércoles de la semana viene. Además, tampoco hubo refugio ayer en los bonos, en los que hubo una venta generalizada especialmente en los tramos cortos llevando los tipos a 2 años norteamericanos a los niveles más elevados desde 2007.

Sectorialmente en Estados Unidos las ventas se centraron en las empresas de crecimiento y tecnología. El Nasdaq se dejaba algo más de un 5%, siendo el sub sector de semiconductores el más castigado con caídas del 6,6%. También sesión complicada para Alphabet (-5,9%) y Meta (-9,4%), ya que el juzgado que seguía el caso de colusión entre las dos empresas, le da la razón en esta contienda, pero deja abierta la puerta a otras denuncias por posible abuso de poder en el mercado de anuncios online. Por otra parte, los sectores defensivos lograron capear mejor las caídas de ayer, siendo utilities (-2,7%) y salud (-3,2%) los más destacados. Finalmente, el sector energético (-2,4%), penalizado en las últimas sesiones, esta vez logró convertirse en el mejor de la sesión debido a las limitadas caídas en el precio del petróleo.